El estudio ¿Cómo comemos?, de la Chilenografía, abordó cuál es relación de las y los chilenos con el desayuno, el almuerzo y la cena, a partir de encuestas aplicadas a 3.253 personas mayores de edad de todo el territorio nacional, durante los meses de marzo, abril y mayo de 2023.
Este reveló que el atributo que más valoramos en nuestras comidas es el sabor, “que sea rico”, siendo el almuerzo la comida más importante del día. Asimismo, refleja una preferencia por comer acompañados.
Además, el estudio contempló preguntas abiertas, de mención espontánea, para conocer cuáles son las marcas que están en la mente de los chilenos en relación con cada comida. Las más mencionadas son Colún, Soprole y Nescafé, en el desayuno; Carozzi, Súper Pollo y Lucchetti en el almuerzo; Súper Pollo, Líder y Colún en la cena.
“Es relevante cómo la tendencia al disfrute o al placer se traspasa a la comida. Es visto menos como necesidad nutricional que como gusto. “Que sea rico” es un atributo que está presente en todas las comidas, como prioridad. El desayuno es la única comida donde la nutrición ocupa un rol preponderante y el sabor es la segunda opción”, señala Marcela Pérez de Arce, socióloga, consultora en La Vulca y directora del estudio Chilenografía.
«El almuerzo es la comida que menos nos saltamos y que más compartimos en familia. Es una necesidad a medio día, pero también una pausa para cerrar la primera parte de la jornada y recargarnos para la segunda. Un 65% de los encuestados está de acuerdo en que su atributo más importante es que sea rico en sabor, mientras que el 56% valora que les deje satisfechos y sin hambre. Placer y satisfacción en nuestras elecciones alimentarias; además, es la comida que más nos gusta preparar y para la cual 70% declara tener una rutina habitual”, explica la directora del estudio.
En relación con la cena, el sabor también lidera como atributo relevante con un 63% de acuerdo, seguido de que no provoque malestares nocturnos. Por otra parte, es la comida que tiene un factor más social: más de la mitad de los chilenos asocia la cena con el relajo y celebraciones. Además, es la comida que, por lejos, más nos gusta compartir con amigos.
“Las comidas se han convertido, en tiempos de incertidumbre y tras años complejos para nuestra sociedad, en un paréntesis de bienestar entre los quehaceres y rutinas. Son momentos de placer inmediato, de compartir, de celebración y observamos que nutrirse es casi una consecuencia. Hoy más que nunca comer es una experiencia: tomamos fotografías a nuestra comida, compartimos nuestros avances en la cocina, cocinamos en familia… es una oportunidad para que las marcas vinculen significativamente con las personas ¡y es una oportunidad de todos los días!”, señala el director de consultoría y socio de La Vulca, José Miguel Ventura.
Además, el estudio indica que a los chilenos les gusta preparar su propia comida. El 85% declara preparar su propio desayuno, 57% su almuerzo y 66% su cena. Esto implica que las marcas tienen una gran oportunidad de vincularse en la cotidianidad de las personas, directamente con sus manos y con las elecciones que realizan para preparar sus comidas cotidianas.